Puntos Clave
• USAID cerró oficialmente el 28 de marzo de 2025, tras 60 años liderando el desarrollo global y la ayuda humanitaria estadounidense.
• La cancelación del 83 % de los programas dejó inconclusos proyectos esenciales, afectando a 58 millones de personas en riesgo de hambre extrema.
• El cierre abre camino a influencias de potencias como China y Rusia, cuestionando el liderazgo global de Estados Unidos en desarrollo internacional.
El cierre de USAID, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, ha dejado a muchos conmocionados dentro de la comunidad internacional de desarrollo. Esta decisión, anunciada oficialmente el 28 de marzo de 2025, marca el fin de más de sesenta años de liderazgo estadounidense en la ayuda humanitaria y el desarrollo global. Fundada en 1961, USAID desempeñó un papel crucial en la política exterior de Estados Unidos, proporcionando apoyo en áreas clave como la lucha contra enfermedades, el alivio de desastres, la educación y la promoción del bienestar en las naciones más vulnerables. Sin embargo, tras meses de recortes, la administración Trump tomó la decisión de disolverla, planteando dudas y generando debates sobre las consecuencias.
¿Cómo se llegó a este punto?

El camino hacia el cierre de USAID no fue inesperado. Desde principios de 2025, señales evidentes surgieron sobre la posibilidad de que la agencia fuera absorbida por el Departamento de Estado. En febrero, el Secretario de Estado Marco Rubio asumió un doble rol como administrador en funciones de USAID, marcando el inicio de un exhaustivo proceso de revisión. Rubio encargó a Pete Marocco, uno de sus principales asesores, liderar un análisis sobre los proyectos activos de la agencia. Este análisis resultó en un histórico anuncio el 10 de marzo de 2025: la cancelación del 83 % de los programas de USAID. En total, se eliminaron alrededor de 5,200 contratos. Solo se trasladaron un puñado de proyectos al Departamento de Estado, al considerar que cumplían con los intereses “prioritarios” de la administración.
Elon Musk, designado por el gobierno como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), respaldó la decisión con declaraciones contundentes. Musk calificó a la agencia como ineficiente y “corrupta” y afirmó que el cierre suponía una victoria para los contribuyentes estadounidenses. Aunque muchos criticaron sus palabras como divisivas, su discurso reflejaba la estrategia más amplia del gobierno de reformar de raíz la política de ayuda extranjera.
Finalmente, el 28 de marzo de 2025, la administración notificó oficialmente al Congreso la disolución de USAID, marcando formalmente su final. Este acto es considerado uno de los cambios más significativos en la infraestructura de asistencia exterior de Estados Unidos en décadas.
El impacto histórico de USAID en el desarrollo global
La decisión de desmantelar USAID representa un cambio monumental debido al legado profundo que la agencia deja atrás. Durante más de seis décadas, la agencia trabajó en programas que abordaban algunos de los problemas más apremiantes del mundo. Facilitó la lucha contra el hambre, proporcionó acceso a agua potable y apoyó iniciativas educativas en comunidades marginadas. Además, jugó un papel crítico en frenar pandemias globales como el VIH/SIDA y la malaria.
Desde una perspectiva geopolítica, USAID también fortaleció la diplomacia estadounidense al construir alianzas estratégicas y fomentar la estabilidad en regiones propensas a conflictos o crisis económicas. Estos esfuerzos no solo salvaron millones de vidas, sino que también proyectaron a Estados Unidos como un líder global comprometido con los valores democráticos.
Sin embargo, con su cierre, la pregunta inmediata es cómo la ausencia de USAID afectará tanto a las comunidades que dependían de su apoyo como a la posición de Estados Unidos en el panorama internacional.
¿Por qué cerrar un pilar tan influyente?
El cierre de USAID fue resultado de una visión específica de la administración Trump sobre la política exterior y la eficacia gubernamental. En enero de 2025, un decreto presidencial impuso una congelación de 90 días en toda la ayuda al exterior. El objetivo, según la administración, era garantizar que el gasto cumpliera con los intereses nacionales. Marco Rubio fue un defensor clave de esta filosofía, argumentando que integrar las funciones de USAID en el Departamento de Estado generaría operaciones más claras y eficientes.
Elon Musk amplificó esta visión al declarar públicamente que la agencia representaba un abuso de recursos. Musk sugirió que construir un nuevo enfoque desde cero permitiría diseñar programas más útiles tanto para los ciudadanos estadounidenses como para los receptores globales de ayuda.
Sin embargo, críticos afirman que esta decisión refleja una ideología más amplia de aislamiento, alineada con la política de “Estados Unidos Primero”. También sostienen que los argumentos sobre la “ineficiencia” de USAID no reconocen el amplio impacto positivo de décadas de intervención en crisis globales.
Impactos inmediatos del cierre
El cierre de USAID tuvo consecuencias rápidas y generalizadas:
- Empleados y contratistas: Miles de trabajadores de USAID perdieron sus empleos. Asimismo, contratistas estadounidenses que dependían de la agencia para proyectos en países en desarrollo enfrentaron una pérdida repentina de ingresos.
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Misión interrumpida: Muchos proyectos humanitarios quedaron inconclusos. Esto dejó a comunidades sin acceso a los recursos esenciales que USAID les proporcionaba, como alimentos, medicinas y servicios de agua potable.
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Impacto en la economía estadounidense: Sectores agrícolas y empresas tecnológicas en los Estados Unidos, que habían establecido contratos con USAID, ahora enfrentan incertidumbres financieras debido a la anulación de acuerdos existentes.
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Relaciones internacionales: La cancelación abrupta de asociados y programas que involucraban a socios como Suecia, Noruega y los Países Bajos ha generado tensiones diplomáticas. Estos países criticaron la falta de planes organizados para la transición.
Consecuencias a largo plazo: humanitarias y estratégicas
Crises humanitarias
El impacto humanitario del cierre es quizás el más preocupante. Con la abrupta interrupción de programas destinados a alimentar, educar y brindar asistencia médica a millones, los efectos globales serán severos. Según el Programa Mundial de Alimentos, casi 58 millones de personas que dependen de la ayuda ahora están en riesgo de sufrir hambre extrema. Las comunidades en regiones afectadas por conflictos armados y el cambio climático están particularmente en peligro.
Nueva influencia de potencias emergentes
La retirada de Estados Unidos del ámbito del desarrollo global abre la puerta para que otros actores, como China 🇨🇳 y Rusia 🇷🇺, llenen el vacío. Estos países han intensificado los programas de infraestructura y ayuda como parte de estrategias más amplias para extender su influencia geopolítica. Esto podría reducir tanto el liderazgo estadounidense como su capacidad para moldear políticas internacionales.
Cuestionamientos legales y políticos
El cierre también llevó a controversias legales. Al interrumpir los programas y fondos sin consultar plenamente al Congreso, algunos críticos afirman que la administración pasó por alto procesos establecidos. Aunque un juez federal dictaminó que la acción presidencial fue más allá de sus límites, las cuestiones legales y financieras del cierre aún están por resolverse.
¿Qué sigue para la política de ayuda de Estados Unidos?
El cierre oficial de USAID deja al gobierno de los Estados Unidos en una encrucijada respecto a su enfoque hacia la ayuda internacional. Aunque algunos defensores apoyan la decisión como una oportunidad para rediseñar las prioridades de la ayuda extranjera, otros ven el cierre como una pérdida histórica que podría repercutir negativamente durante décadas.
En este momento, cuando las necesidades humanitarias alcanzan niveles sin precedentes, la decisión de disolver una institución como USAID será debatida ampliamente entre legisladores, académicos y ciudadanos. El futuro de la política exterior estadounidense dependerá de cómo responda el gobierno a las necesidades globales en los años que vienen.
Los lectores que deseen obtener más información oficial sobre la disolución de USAID u otras iniciativas del gobierno pueden visitar el sitio web de USAID. También se pueden explorar análisis detallados sobre el impacto de estas políticas en ‘VisaVerge.com,’ que continúa monitoreando los cambios disruptivos que afectan tanto a migrantes como a comunidades globales en sistemas de ayuda y desarrollo estadounidense.
Aprende Hoy
USAID → Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, enfocada en proyectos humanitarios y de desarrollo global desde 1961 hasta 2025.
Eficacia gubernamental → Capacidad de un gobierno para administrar recursos y programas de manera eficiente, maximizando beneficios y minimizando desperdicios.
Congelación de ayuda al exterior → Suspensión temporal de la asistencia económica y humanitaria otorgada por un gobierno a otros países.
Prioridades nacionales → Intereses principales de un país, como seguridad, economía o bienestar ciudadano, que guían decisiones políticas.
Vacío geopolítico → Espacio de influencia dejado por un país, aprovechado por otros para expandir su poder o presencia estratégica globalmente.
Este Artículo en Resumen
El cierre de USAID refleja un cambio histórico en la política exterior de Estados Unidos. Tras seis décadas liderando ayuda global, su final deja millones en incertidumbre y cede terreno a potencias emergentes como China. La decisión simboliza un giro hacia el aislamiento, cuestionando si el vacío será insustituible o estratégico.
— Por VisaVerge.com
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